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  • Condominio El Rehue – Villarica

    Ubicación: Villarica, Chile Superficie: 20.000 m2 Año: 2016 El principal punto que se trabaja en este proyecto es la mimetización con el lugar y la relación entre el contexto inmediato y sus vistas cercanas, inmediatas y lejanas. En este orden el primer punto que se trabaja en la elaboración del plan maestro es el desarrollo de un conjunto que acuñe el concepto de Bosque-Parque. En donde se cree una trama orgánica que conjugue los edificios y el equipamiento a lo largo del espacio público y en donde este se transforme en el elemento protagonista de este proyecto. Luego se piensa una tipol ogía de edificio que reúna los elementos presentes en la memoria colectiva del lugar. Estos elementos se reinterpretan en edificios que por su volumen y altura logren tramar armoniosamente el parque que se desarrolla en el predio. El conjunto funde situaciones que actualmente se presentan en el terreno como el agua, el llano y el bosque. Primero se decide elaborar una trama de distintas circulaciones que organicen el espacio. Estas circulaciones configuran las distintas formas de habitar el lugar: la calle de acceso, el camino que conecta cada edificio y el sendero que recorre el conjunto en su totalidad. En estas tres formas de circular se individualizan las circulaciones de autos y los recorridos exclusivos para los habitantes del conjunto. A lo largo del sendero se configuran pequeñas explanadas que albergan hitos o infraestructuras para el recorrido. Las trama de las circulaciones junto con las cotas de nivel conforman los lugares en donde se emplazarán los edificios. La disposición de estos construye dos lineas de edificación que mantienen un valle central para el desarrollo de las actividades recreativas y deportivas de los habitantes del conjunto. Como los distintos quinchos, juegos infantiles, senderos de caminatas y trote, miradores contemplativos, laguna y piscinas y el bosque. La posición de cada edificio está orientada de tal manera que ningún volumen interfiera con otro en la vista norte del lugar, que mantiene de fondo el Lago Villarrica y que por otro lado encuadren hacia el oriente el volcán Villarrica y hacia el poniente la ciudad de Villarrica. El edificio se origina en la re interpretación de los materiales presentes en la memoria del lugar y en la forma en que se desarrolla la vivienda en la zona. Se adopta la madera, la teja de alerce y los colores de las distintas maneras con que se han impermeabilizado en el tiempo. Principalmente se piensa un módulo que integre las actividades que se realizan en el exterior y las actividades que se realizan en el interior de la vivienda, expresadas en diferentes materiales y coloridos. El edificio se desarrolla de forma hermética como un volumen opaco de madera con vistas controladas hacia el poniente y el oriente. De esta forma el volumen está diseñado para mantener el calor y potenciar las actividades que se realicen en los espacios públicos de cada unidad tipológica. En cambio hacia el norte el edificio se desarrolla de forma expuesta con grandes terrazas que contienen las actividades que se realizan en el exterior de cada vivienda por medio de una estructura de maderas claras que diferencian ambas actividades y vinculan el contexto en sus diferentes niveles con cada unidad. Hacia el sur el volumen se abre configurando el acceso a la torre en un núcleo vertical y abierto de circulación a cada unidad. Cada volumen se piensa como un edificio de cinco pisos con tal de mimetizarse en el paisaje y en el parque que se proyecta. Cada edificio se expresa como un volumen cuadrado con dos departamentos por cada piso y se proyectan dos tipologías de torre mezclando en una los departamentos de 75m2 con los departamentos de 100m2 y otra tipología que mezcla los departamentos de 75m2 con los departamentos de 140m2. Cada edificio se funda en un zócalo que alberga estacionamientos cubiertos, bodegas y recintos comunitarios. Como gimnasio, salas de eventos y piezas de juegos además de zonas de acceso.